Una rosa para María con Mara, en este vídeo de la semana.
Hola a todos y feliz Cuaresma. Hoy os traigo un vídeo que me a sorprendido la dulzura y la sensibilidad que derrama y que nos habla del mucho amor que sentía María por su Hijo y su humildad.
He escogido este canto para hoy, por que ayer enterramos a la hermana de mi difunto padre. De los cinco hermanos solo quedaba ella con vida. Ahora todos ellos están descansando en el cielo, de todos los sufrimientos de la vida que les tocó vivir.
Y quizás por ello, saben lo importante que es cuidar de los suyos. Y por ellos pasaron estrecheces y nos ayudaron en todo lo que pudieron.
Ayer, el sacerdote que realizó el oficio, nos hablaba, que lo más importante que puede hacer el ser humano, es el amar y aprender hacerlo. No por que sea lo más fácil, sino por que el amor nos salva a todos de caer en está enemistad en la cual vivimos hoy en día entre Catalunya y España. O en los abusos de poder y violencia física y sexual, tanto en hombres como en mujeres y niños. Por no hablar de las guerras.
Una rosa para María, nos abre los ojos y el oído hacía la figura maternal, referencia para toda la Iglesia, de María como madre nuestra. Sin ese amor hacía su hijo y esa humildad, que le hizo entrar en la voluntad de Dios, nuestro Padre del Cielo, hoy no abría Iglesia en este mundo.
Su amor, es reflejo del amor de nuestro Padre del Cielo, hacía sus creaturas. Hacía todos nosotros, por muy difícil que nos resulte creerlo. Por este amor mando a su Hijo a la tierra, para sufrir lo que nosotros sufrimos y elevar nuestros sufrimientos hacia el cielo. Con una oración constante y fluida, de nosotros hacía nuestro Padre del Cielo y hacia esta Familia de Nazaret, toda ella santa. Donde estaba María, como madre y Jesús, nuestro hermano. Y Jose, siempre en un segundo plano, pero siempre presente, como Dios.
¡Que hermoso amor! ¡Qué gran misterio esté del amor de un Dios todopoderoso, que sacó a su pueblo de Egipto y le dio una tierra que manaba leche y miel! Como muestra, para toda la humanidad, de que esto mismo lo hace con cada uno de nosotros, si lo aceptamos en nuestra vida y le abrimos nuestro corazón para que Él pueda entrar en nosotros y hacernos su morada.
Esta es la locura, el misterio que revivimos en esta Cuaresma. Esta locura de amor tan infinito, en que un Dios, se rebaja a la condición de hombre. Y no busca su poder y gloria, si no la salvación del hombre. Nos enseñó que el amor todo lo conduce y lo llena. Si sabemos verlo.
Por todo ello este vídeo UNA ROSA PARA MARÍA es tan precioso. Pues ella forma parte de la creación y a través de ella, todo se renueva.
Y ahora, escucha la canción y bendice a nuestro Padre del cielo, por todo cuanto nos ha dado, desde que creó el mundo y todo el universo.
¡La paz de Dios con todos vosotros!