#VideoDeLaSemana con Fieles Voces «Brilla en mi vida» #BarcelonaCatolica
Hola a todos y feliz viernes.
Hoy os traigo una canción suave. De esas que te mecen con su melodía y te calma con sus voces y que nos hace brillar, como si fuéramos estrellas. “Brilla en mi vida” es la canción de hoy.
Y es una buena petición, en estos tiempos de cuaresma. Siempre estamos hablando del perdón de nuestros pecados. Siempre decimos cuánto nos ama el Señor. Pero ¿Comunicamos este perdón y este amor a los demás?
Somos mentalizados, desde pequeños, que siempre hay alguien que nos quiere robar lo que tenemos o que nos quiere mal y que por ello debemos defendernos, no confiar en los demás y sobre todo no compartir nada con nadie. Lo nuestro es nuestro y nadie nos lo debe quitar.
Por todo ello, acabamos siendo simples sombras en este mundo. Hablamos mucho de Dios, pronunciamos su nombre creyendo que esto nos hace santos o buenos ante los ojos de los demás, pero cuando aparece la realidad de lo que somos, se produce el escándalo. Pues tantas medallas nos ponemos, que nos pesan tanto, que nos miramos a nosotros mismos con satisfacción, pero no alzamos la vista para ver lo que nos rodea. La realidad en la que vivimos.
Y esa realidad, la realidad de todos los seres humanos, es necesaria, en todos los ámbitos de nuestra sociedad, el poder ser reflejo de este amor de Dios con los hombres. Hay que mostrar empatía, amor, caridad, humildad. ¿Cuántos de nosotros hacemos esto?
Recordáis esa palabra que dice “El Señor dijo a los de su izquierda, apartaos de mí, pues no os conozco. Pues cuando tuve sed, no me disteis de beber.Cuando tuve hambre, no me disteis de comer. Cuando estaba desnudo, no me vestisteis”. Todo ello es reflejo de este amor de Dios con nosotros y con la humanidad.
Nos asusta tener que dar testimonio de Dios. Pero no nos asusta ir al juzgado a denunciar a alguien. No tenemos miedo a ir a una manifestación, ni a defender a nuestros hijos ante una adversidad. ¿Por qué nos pasa esto?
Porque el amor de Dios, no es el amor del mundo, no es un amor de hombre y por tanto no se puede medir. Nuestra mente, como no lo puede abarcar, dice que es mentira, que no es posible amar así.
Solo siendo reflejo de este amor, ante el mundo, ante todos, se hace patente, ante todos, de que Dios existe. Pues lo hemos visto y experimentado en nuestras vidas.
Así que si queremos ser reflejo del amor de Dios. Si queremos amar de verdad, ir más allá de un amor humano, seamos reflejo de esta luz. Le pedimos a Dios “Brilla en mi vida” para llevar esta gracia a todo el mundo.
La paz de Cristo quede con vosotros.
Apoyame en mi labor
En primer lugar quiero daros las gracias a todos por vuestro apoyo continuado a mi labor evangelica de anunciar la palabra de Dios a traves de la música y bajo…