Eres mi Dios

#VideoDeLaSema con Via Cantus y Paulina Rojas «Eres mi Dios» #BarcelonaCatolica

Hola a todos y feliz viernes.

Hoy quería continuar con la alabanza a nuestro Dios o Padre del Cielo que empecé la semana pasada. Porque ¡qué difícil es alabar a Dios en todo momento! Esto es una gracia. Y pensé ¿por qué no alabar al Señor con estas líneas? Aunque todas ellas, eso creo, es una alabanza a nuestro Dios.

Hoy os traigo una canción del 2024 titulada “Eres mi Dios”. Es reafirmar con el canto aquellas palabras “Solo Dios basta”. Porque cuando hay un encuentro real con Dios, cuando lo conoces de verdad, descubres que todo lo demás, aquello en lo que se apoya esta sociedad, es secundario.

Por eso, hoy, quería hacer esta alabanza a nuestro Padre del Cielo. Porque, si es verdad, que debemos asumir siempre, que nadie nos va ayudar en este mundo, si no nos movemos nosotros. Debemos saber en nuestro corazón, que nuestro Dios actúa de forma misteriosa en los corazones de los hombres. Incluso en los no creyentes. Y al final aparece si le pedimos ayuda de verdad.

Son palabras muy bonitas, pero recordad el “Cántico de los tres jóvenes” o la Palabra de Daniel de la cual sale este canto. Como en la plenitud de su reinado, el Rey Nabucodonosor erigió una estatua de sí mismo, en las plazas de sus ciudades para que todos le adorasen y estos tres jóvenes se negaron y eso que eran servidores del rey, pero eran Judios. Y el Rey al enterarse, monta en cólera y los mete en un horno de fuego para matarlos. Pero estos alaban a Dios en medio de las llamas y este envía un ángel para protegerlos y salvar sus vidas. El Rey al darse cuenta de ello, cree en el Dios de los Judios. Que es nuestro Dios.

Hemos de darnos cuenta, que Dios aparece cuando damos testimonio de fe. De una fe real, no de chichinabo. Este testimonio es lo que nos salva a nosotros y al resto del mundo. Y esta fe nace del conocimiento en nuestro corazón de que Dios existe y es bueno y está deseando darse a conocer a toda la humanidad.

Y viene sencillo y humilde a través de su hijo. Algo que muchos no aceptan. Pero al hacerse humilde y sencillo puede llegar a nuestros corazones, curar nuestras enfermedades, vendar nuestras heridas. Y en la intimidad de nuestro corazón prende la llama de esta fe y esta gratitud y alabanza a nuestro Dios.

El peligro siempre existe. Los enemigos siempre están ahí, esperando como lobos feroces, seguros de sí mismos, para mordernos y devorarnos. Pero Dios es nuestro Dios. Nuestro puerto seguro. La piedra en la cual edifico mi vida.

Acabaré con una alabanza a mi Padre del Cielo, a nuestro Padre del Cielo. Bendito tu, que viendo nuestra pobreza de corazón, no nos dejastes solos y mandaste a tu Hijo para mostrarnos el camino a seguir. Y abrir una puerta de salvación para toda la humanidad, que solo aquellos que la desean, transitan por ella. Bendito ahora y siempre.

Apoyame en mi labor

En primer lugar quiero daros las gracias a todos por vuestro apoyo continuado a mi labor evangelica de anunciar la palabra de Dios a traves de la música y bajo…