Todo a su tiempo

#VideoDeLaSemana con Lenny Negroni «Todo a su tiempo» #BarcelonaCatolica

Buenos días a todos. Hoy os traigo un vídeo y una reflexión. El vídeo se titula “todo a su tiempo” y la reflexión es “Los tiempos de Dios”.

La canción nos habla de esperar a que el Señor acontezca en nuestras vidas. Como nos sana, evita que tomemos venganza y justicia propia. Porque siempre nos acompaña.

Y los tiempos de Dios, no son nuestros tiempos. ¡Qué difícil es esperar en Dios! Esperar que Dios actúe. Que se haga presente. Nosotros cuando algo nos duele, queremos un remedio ya. Si nos hacen una injusticia, gritamos, golpeamos, hacemos lo que sea necesario para que el otro tenga su recompensa.Hacemos nuestra justicia.

Cuántos de nosotros confundimos nuestra fe, con nuestra voluntad. Llevo tiempo pensando en ello. Porque en toda mi vida de fe he escuchado a muchos que valoran su éxito con la voluntad de Dios. Pero luego hablando con ellos he visto que hablan de sí mismos.

Entonces ¿Cuál es la voluntad del Señor?¿Cuáles son sus pasos, a los que debo ajustar los míos? Es muy sencillo, los dos primeros mandamientos, que son imposibles de cumplir por los humanos, si el Señor no nos ayuda.

Pues si amamos a los demás y a Dios, deberíamos perdonar las ofensas y las injusticias que recibimos. Deberíamos no hacer trampas en nuestros negocios y en algunos casos no hacer caso a nuestros jefes.

Pero siempre nos sale el mismo pensamiento “no se puede vivir con fidelidad nuestra fe”. Pero la pregunta es ¿No se puede o no queremos vivirla así?

El Señor nos dice, que siempre estará con nosotros. Si creemos en esto, porque luchamos, denunciamos, golpeamos, nos vengamos, mentimos, etc. Me dirás “Por que soy pecador”. Pero no podemos hacer de nuestra condición nuestra excusa, pues ello demuestra que no estamos, en absoluto, dispuestos a cambiar. Y si no queremos cambiar, no podemos acoger a Jesús.

Y si no acogemos a Jesús, no podemos descubrir al Padre y si no descubrimos al Padre, nuestro Padre del Cielo, no tiene sentido la Iglesia y vivir en la fe. Y esperar en el Señor. Y no podemos esperar en el Señor si no estamos unidos en la fe con él.

Y para estar unidos en la fe con Jesús hay que rezar, escuchar sus palabras y celebrar la eucaristía y la penitencial y abrir nuestro corazón a Dios. Entonces, en nuestra intimidad, podremos buscar y esperar los tiempos de Dios y alegrarnos cuando se haga visible para nosotros y para todos.

Pues Dios, siempre está con nosotros. ¿Y nosotros lo estamos con él?

La paz de Cristo con vosotros.

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