Dios no es ajeno a tu sufrimiento.
Hay que empezar a desmitificar y desmonizar que las enfermedades de la mente son causadas por la falta de fe o por personas débiles.
Por eso Dios no es ajeno a tu sufrimiento
Hay que empezar a desmitificar y desmonizar que las enfermedades de la mente son causadas por la falta de fe o por personas débiles.
Por eso Dios no es ajeno a tu sufrimiento