Esta semana con María Ángel, Santo Pan de vida. En vídeo de la semana.
Hola a todos y feliz viernes y fin de semana. Esta es mi ultima entrada hasta el proximo septiembre. Me doy un mes de descanso. Que ya va bien.
Esta semana os traigo una canción, Santo pan de vida, que desde la escuché me ha hecho pensar y mucho, en mi fe y en si acojo a Cristo en mi corazón.
La canción nos presenta un Jesucristo en la eucaristia, en la forma del pan y el vino, que son su presencia cerca de nosotros. En nuestros días. Y María Ángel, nos canta que quiere ser receptaculo, como la Virgen María del corazón de Jesús. De ese amor que derramó por todos nosotros.
Para mi ha sido muy importante descubrir, lo que uno cambia cuando habre su corazón a Cristo y deja que entre en el y nos limpie de mercaderes, el corazón. Como cuando lo hizo en el templo de Jerusalen. Por que si queremos ser templo de Cristo y acoger su palabra y dar obras de vida eterna, debemos limpiar nuestro corazón de idolos y todo aquello que nos impide tener a Dios cerca, como Padre.
No es facil, pero podemos comprender y ver, por que a unos se les llena la boca de palabras de Jesucristo, palabras que se saben de carrerilla, pero sus vidas no van acorde con dichas palabras. Son como los fariseos, los amantes de la ley, que saben tanto de ella, que tambien saben como hacer que la misma valla a su favor. Pero se olvidaron de una cosa, del amor del Padre hacia sus creaturas y su pueblo.
Y es ahí donde podemos descubrir, quienes somos. No hay ser humano que no peque. No hay ser humano que no sea tentado por satanas. Y cuanto más importante sea para la Iglesia, mayor serán sus tentaciones. Pues su victoria, la de satanás, sería que dicha persona se marchase de la Iglesia. Y la sociedad lo aplaudiria por hacerlo y acusaría, de nuevo a la Iglesia, de no estar acorde con los tiempos o de impostura.
Si somos fariseos, debemos buscar la manera de corregirnos y abrir nuestro corazón y dar cobijo en él a Cristo. Pero si somos de los que ya llevamos a Cristo en el corazón y tenemos la necesidad de que no se marche. Caminemos en el camino del amor a los demas.
Pidamosle a Cristo que nos ayude a ser receptaculo de su cuerpo y sangre y que nuestra vida sea reflejo de nuestra fe. Y él estará presto ayudarnos en todas las dificultades y tentaciones que tengamos durante nuestra vida.
Y demosle gracias, por no dejarnos solos y siga iluminando nuestro camino de humildad, servicio y amor. Por que solo con él, podemos ser luz para este mundo, que tanto necesita una mano amiga.
Recordad a Jesús con los leprosos. No los rechazaba, sino que los tocaba y los curaba. Y a todos aquellos, que la sociedad en esos días, decia que eran impuros.
Espero que tengais un feliz agosto. Y que estas vacaciones, ahí donde esteis, nos sirvan a todos, para ir a escuchar la palabra de Dios. Siendo solo lo que somos. Fieles que desean encontrarse con el maestro, tambien en este tiempo.
La paz de Cristo esté con vosotros.