Permanezcan en mi amor

#VideoDeLaSemana con Javier Bru. Permanezcan en mi amor. #BarcelonaCatolica.

Buenos días a todos

Espero que el Señor les cubra de bendiciones y su corazón exulte en alabanzas hacía él. Nuestro Padre del cielo.

Hoy os traigo un video titulado “Permanezcan en mi amor”. Si no recuerdo mal el evangelio de la semana pasada habla de amarnos como él nos ha amado y durante esta semana nos ha estado hablando que permanecer fuera de él, no podemos dar fruto. ¿Pero que fruto debemos amar?

¿Enarbolar la bandera de la intransigencia, contra todo aquello que va en contra de nuestra fe y proclamar una guerra santa? ¿Defender nuestra ideas, hasta la sangre, por creernos que Dios está siempre con nosotros?

Jesús nos amó hasta el extremo. Como Dios lo hizo al enviar a su único hijo, para que lo pudiéramos clavar en la cruz. Cómo un maldito. Pues se proclamaba Hijo de Dios y esto para los judios era una blasfemia, a pesar de los signos que hizo.

Y el último fué, resucitar, después de muerto. Algo que nadie ha hecho jamás. Y todo ello lo hizo por amor, a las creaturas de Dios. A sus hermanos por la promesa y adoptivos. Es decir, por toda la humanidad.

Por ello, nuestro signo, es el amor. La entrega mutua. El darse al hermano. Cuidar de aquel que lo necesita. Amar hasta el extremo a tu hijo que no soportas, por ser totalmente contrario a tu fe y vive desordenadamente. A tus padres que son viejos y chochean. A esa persona, que por mucho bien que le hagas siempre tiene una puya contra ti.

Y todo esto, solo podemos hacerlo si estamos con Cristo. Si lo aceptamos en nuestras vidas. Si dejamos que transforme nuestro corazón y elevamos nuestros ojos a nuestro Padre del Cielo y de nuestro corazón sale una alabanza buena y agradable a Dios. 

Como ese publicano que no se atrevía a alzar la mirada y pedía a nuestro Padre del Cielo que tuviera misericordia de él.

Cuánta fe, hay en esta actitud cuando sale de un corazón humilde y necesitado. Solo en esa humildad podremos amar. Podremos dar testimonio de Dios Padre a los demás y dejaremos de enarbolar tantas banderas por tantas injusticias recibidas o deseos inclumplidos y ser auténticos cristianos.

Si quieres saber si amas de verdad, pregúntate, si morirías en la cruz por aquella persona que tanto dices que amas. Como hizo Cristo.

La paz de Cristo quede con vosotros.